Gestores ambientales transportan desechos que genera el turismo en Galápagos

Hasta una planta procesadora de Pifo, en la ciudad de Quito, llegan miles de desechos comunes producto de la actividad turística en las islas Galápagos, que se encuentra a más de 1 000 kilómetros de distancia.

Los desechos, incluso, se consideran peligrosos y llegan con el fin de ser destruidos de manera técnica y así minimizar el impacto ambiental que generan.

Según el gerente de Celebrity Cruises Galápagos, Fausto Arcos, la presencia humana en las islas obliga a hacer una análisis a largo plazo sobre el nivel de desechos en esta región, que son producidos por turistas y residentes. Además considera que la responsabilidad también recae sobre las empresas que llevan al turista hasta el archipiélago.

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Considerando que el impacto ambiental es grave, desde ya, gestores ambientales como Redescombal trabajan en conjunto con organizaciones de islas como la San Cristobal. La empresa tiene la capacidad de reciclar al menos 27 tipos de desechos y residuos.

Primitivo Espín, representante de Redescombal, asegura que están preparados para el almacenamiento de todo tipo de desechos. Además asegura que la cantidad se ha incrementado en el último año, producto del alto nivel de visitas en las islas. Por ello buscan extender los centros de acopio para la evacuación de residuos.

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