Una fuerte tormenta de nieve paraliza Washington durante horas

Una fuerte tormenta de nieve paralizó este lunes durante varias horas la capital de EE.UU. y distintas localidades de los estados de Maryland y Virginia.

Escuelas y oficinas federales suspendieron sus actividades e incluso los tres grandes aeropuertos de la región vieron afectada su operación.

En el aeropuerto Ronald Reagan de Washington, la nieve alcanzó una acumulación de 6,7 pulgadas (unos 17 centímetros).

El temporal, que comenzó en la madrugada y se extendió hasta después del mediodía dejó una estela blanca a lo largo de la región.

Debido a la nevada, alrededor de 448.597 clientes en Virginia y 79.470 en Maryland quedaron sin el servicio de electricidad.

La nieve, cuya acumulación varió entre 5 y 10 pulgadas (12,7 y 25,4 centímetros), agravó la crisis que afronta la operación aérea en el país.

La Administración Federal de Aviación ordenó paralizar la operación en los aeropuertos Ronald Reagan y el Thurgood Marshall de Baltimore.

Horas después, la FAA anunciaba que se habían puesto en marcha trabajos de deshielo de las aeronaves y las pistas en esos aeródromos.

También el aeropuerto de Dulles, en Virginia, advirtió en su cuenta de Twitter sobre la cancelación de «algunos vuelos» debido al temporal.

Incluso el presidente estadounidense, Joe Biden, no escapó de los efectos de la tormenta.

Él debió esperar a que el personal en tierra lograra mover las escaleras para poder descender de su avión.

Al final, Biden bajó en medio de la espesa nieve y su caravana se abrió paso sobre una alfombra blanca que cubría la pista de la Base de la Fuerza Aérea Andrews, en Maryland.

La web especializada Flightaware reveló este lunes que más de 11.000 vuelos sufrieron retrasos y unos 4.585 más fueron cancelados.

Pero la nieve ocasionó igualmente retrasos en los planes del las autoridades para contener la pandemia.

El Departamento de Salud del Distrito de Columbia informó que los sitios de pruebas de covid-19 permanecerán cerrados esta jornada debido a la emergencia.

De igual forma, numerosos colegios en Washington y algunas zonas de Maryland y Virginia paralizaron su actividad.

Las oficinas federales suspendieron asimismo su actividad, lo que provocó que se cancelaran las ruedas de prensa en la Casa Blanca.

Las agrestes condiciones también complicaron la movilización de vehículos, causando atascos en diversas vías.