Por Patricia Armijo B. |
Conseguir trabajo es uno de los objetivos de jóvenes y adultos; y lo hacen en todas las áreas de conocimiento. Aunque hay variables según ciertas profesiones, la hoja de vida es clave para buscar empleo.
En Ecuador, el 71,2% de la población está en edad de trabajar, según la Encuesta Nacional de Empleo, Desempleo y Subempleo (Enemdu), de abril de 2023. Sin embargo, el 4% de la población se encuentra en el desempleo.
A eso se suma que hay un 19,9% de subempleo y un 30,3% de empleo no pleno. Además existe un 10,4% de personas que tienen un empleo no remunerado.
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De acuerdo con una investigación de la plataforma norteamericana The Ladders, los reclutadores de personal se toman un aproximado de 7,4 segundos para tomar una decisión inicial en cuanto a la contratación. Esto como parte de un primer paso en el que revisan los currículums rápidamente.
La hoja de vida ideal
Los expertos de la universidad de Harvard enlistaron una serie de recomendaciones para que este proceso sea exitoso. Aunque no es una tarea difícil puede llevar un tiempo.
Lo primero que se debe tener en cuenta es que el formato no puede ser universal y enviado a todo tipo de vacantes. Para cada proceso se debe personalizar según los requisitos de la empresa y el cargo al que se aspira.
Según los expertos, la información de contacto es una de las cosas más importantes que se debe añadir. Además de un número de teléfono y un correo electrónico será válido agregar el enlace al perfil de LinkedIn o a una página web donde conste el trabajo realizado anteriormente.
Las referencias deben constar con datos actualizados y reales. Es importante que quien busca empleo consulte previamente a las personas que colocará como referencia para garantizar que esta sea favorable.
El formato
La presentación del documento juega un papel fundamental a la hora de presentarse a un empleo. Lo recomendable es que conste en una sola hoja sencilla.
Harvard apunta las siguientes recomendaciones en cuanto al formato:
- Debe tener consistencia, coherencia y un contenido atractivo.
- Mantener el equilibrio con el espacio en blanco.
- Usar formatos de estilo de texto para destacar palabras o frases. Puede incluir cursivas, negritas, subrayado y mayúsculas.
- Los encabezados deben ir enumerados en orden de importancia.
- En estos hay que colocar la información en orden cronológico inverso, es decir, desde el más antiguo hasta el más nuevo.
La foto
Entre los expertos no hay un consenso en cuanto a si se debe poner o no la fotografía en la hoja de vida. De acuerdo con Alejandro Motta, estratega de empleo, «se advierte una posición más marcada en contra de la foto en el hemisferio norte, especialmente en países de habla inglesa. Y a favor en la América Latina de habla hispana».
Luego de aplicada una encuesta en LinkedIn, lo que el experto determinó fue que el 48% de las personas están de acuerdo con dejar de incluir la foto en la hoja de vida. El 43% dijo que se debe añadir y el 9% apuntó que depende del caso.
Aunque no hay normativa a favor o en contra de esta práctica, sí hay recomendaciones para hacer que este ingrediente añada valor a la hoja de vida. Es importante que la foto sea personalizada según la profesión del postulante.
En general, se recomienda que sea una foto en primer plano y con buena iluminación. Las ‘selfies’ quedan completamente descartadas.
El postulante debe vestir de forma profesional y con un fondo neutro. El gesto amable siempre ayudará a humanizar la hoja de vida y quedar en la mente de los reclutadores.
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