La semana pasada Argentina llegó hasta tierras brasileras para enfrentar a La Canarinha por una fecha más de las eliminatorias sudamericanas.
Pero cuando se jugaba el minuto cinco del primer tiempo, agentes sanitarios entraron al campo de juego para detener a tres jugadores de Argentina que militan en la Premier League y que habrían incumplido con una disposición de las autoridades sanitarias del país.
Tras el hecho, calificado por muchos como “bochornoso”, la FIFA tomó la potestad de decidir qué sucedería tras la suspensión del partido que dejó a todo el continente con las ganas de ver nuevamente a Messi contra Neymar, en una especie de ‘revancha’ de la final de la Copa América que ganó Argentina.
En ese sentido, el máximo organismo del fútbol profesional decidió abrir archivos disciplinarios a las dos federaciones, de Brasil y de Argentina, para determinar cuál fue la razón por la que se suspendió el encuentro.
Desde Brasil argumentan que la legislación de ese país dispone que los viajeros que llegan desde Gran Bretaña o la India, guarden cuarentena obligatoria de 14 días, que los jugadores que militan en la Premier League de Inglaterra, no habrían cumplido.
Según el portal de noticias RT, “Por su parte, el presidente de la Asociación del Fútbol Argentino (AFA), Claudio Tapia, dijo que «no se puede hablar de mentira ni de nada», porque «hay una legislación sanitaria que permite jugar los partidos de fecha FIFA y los de copa internacionales por equipos»”.
La FIFA lamentó lo sucedido y detalló que eso impidió al mundo ver el choque entre dos de las naciones futbolísticas más importantes del mundo, Argentina y Brasil.
Abrir procesos disciplinarios es el primer paso que da la FIFA, posteriormente, y según el máximo organismo del fútbol, los entes pertinentes tomarán decisiones a su tiempo.