El analista político César Febres Cordero habló de la situación de Guillermo Lasso en los dos años que lleva en la Presidencia de Ecuador. Dijo que se trata de un Gobierno que no solamente ha defraudado al país, sino a sí mismo.
Seguramente, dijo, «Lasso tenía mayores ambiciones y se topó con que la gobernabilidad era bastante difícil». Para el analista, la aplicación de la muerte cruzada es una admisión de que «no iba a tener dos años fáciles».
El sustento para esa medida no iría por el lado de los bloqueos de la Asamblea Nacional. Más bien «eran sus propias limitaciones internas y la falta de ejecución de sus ministros», señaló Febres Cordero. Agregó que ese hostigamiento lo han enfrentado los expresidentes Jaime Roldós, Oswaldo Hurtado, Rodrigo Borja y casi todos los presidentes desde el retorno a la democracia.
Y aunque «no digo que sea lo justo o lo correcto, pero ya han tenido que lidiar con eso» otros mandatarios. «Puede ser un plan macabro lo que enfrentaba el Presidente pero inconstitucional no era», refirió.
El mismo razonamiento aplica para la muerte cruzada. Dijo que depende de una cuestión de interpretación, al igual que se hará con la temática para emitir Decretos-Ley.
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Obras y deudas pendientes
En cuanto a obras, el analista no destacó más que la vacunación, en el primer año de Gobierno. En este segundo «resolvió la crisis que él (Lasso) con otros actores políticos crearon», dijo en el espacio de entrevistas de Teleamazonas.
Sin embargo, recalcó que habrá paz en los próximos meses porque los actores políticos que podrían «calentar las calles» están pensando en las elecciones.
Febres Cordero también habló de macroeconomía y dijo que no se trata de «tener medio balanceadas las cuentas del Estado». Cuestionó sobre el empleo y su calidad, así como el consumo, que «no solo se mide en ventas», respecto con la estabilidad económica y la calidad de vida de los ecuatorianos, señaló.
En cuanto a innovación y el crecimiento «no lo estamos viendo», dijo. Y denunció que Lasso deja más pendientes que obras. Eso incluye las 200 000 viviendas rurales que ofreció y «deja en un número bastante inferior». Lo mismo con los 1 000 millones de créditos, de los cuales apenas se han entregado 250 000, sostuvo.
Para el analista, la mayor deuda es la falta de aplicación del «discurso del encuentro, cambio, pluralismo, todo lo que no habíamos visto». Un cambio que, sostiene, no se podrá realizar con las nuevas autoridades.
¿Alcances?
Mientras Lasso permanece en el poder, «habrá que ver cuál es el alcance de económico y urgente tal como puede interpretarse o debe haber una delimitación de la Corte Constitucional que sentará un precedente».
En lo tributario, Febres Cordero sostiene que las decisiones son las más fuertes y una siguiente Asamblea no podrá quitar lo aplicado en esa materia. Será necesario que el siguiente Mandatario proponga una reforma para cambiarlo en el Legislativo, dijo.
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