Una cría de elefante falleció en Sumatra después de perder la mitad de su trompa al caer en una trampa colocada por cazadores furtivos.
«Recibimos información de que algunos vecinos en el área habían visto una cría de elefante separada de su grupo (…) Tenía la trompa herida», dijo Agus Arianto, jefe de la Agencia de Conservación de Recursos Naturales de Aceh.
El pequeño paquidermo de un año de edad se quedó rezagado de su manada al caer en la trampa en Aceh, una región situada en el norte de la isla de Sumatra.
La hembra era uno de los últimos 700 elefantes salvajes que quedan en Sumatra y estaba débil cuando la encontraron al día siguiente en Alue Meuraska, una aldea en una zona de jungla.
Los veterinarios tuvieron que amputarle parte de la trompa y la cría murió dos días después debido a una infección interna.
«También tenía problemas de alimentación porque no podía digerir bien los alimentos», explicó Arianto por teléfono.
Los cazadores furtivos matan a los elefantes principalmente para hacerse con los colmillos de marfil que venden por precios lucrativos en el mercado ilegal.
Otro caso
En 2018, otra cría de elefante falleció en Sumatra tras caer en una trampa para cerdos salvajes.
Los paquidermos son animales inteligentes y sensibles que crean vínculos estrechos y durareros entre los miembros de la manada.
El elefante de Sumatra es una subespecie del elefante asiático que se encuentra gravemente amenazada debido a la disminución de su hábitat.
El archipiélago indonesio es uno de los lugares con mayor biodiversidad del planeta.