Expertos han identificado la participación de al menos tres grupos violentos organizados en las manifestaciones de junio de este año. Hablan también de la injerencia de organizaciones políticas.
Lo ocurrido en San Antonio de Pichincha, donde militares fueron retenidos y un ciudadano falleció, están entre los episodios más violentos.
Han pasado 11 días desde que la firma del acuerdo de paz que le puso fin al paro nacional, sin embargo, los hechos de violencia que se registraron en los días más álgidos aún están en el debate.
Uno de ellos es el ocurrido el 23 de junio en San Antonio de Pichincha cuando un grupo de manifestantes atacó un convoy de las Fuerzas Armadas, retuvo militares y quemó dos buses de la institución. Este hecho, a decir del experto en seguridad Mario Pazmiño, no es un acto improvisada y detrás de esto estarían al menos tres grupos violentos.
Hubo también injerencia política y la movilización en esta parroquia del norte de Pichincha, asegura Pazmiño.
Según el portal digital Primicias, hay varias voces que han señalado la militancia del correísmo como actores dentro de las manifestaciones.
En San Antonio de Pichincha se habla de una supuesta injerencia de la prefecta Paola Pabón; hecho que fue desvirtuado por la institución mediante un comunicado.
Esta información de grupos violentos y organizados durante el paro también la maneja el Gobierno.
Sobre lo ocurrido en San Antonio de Pichincha las Fuerzas Armadas se pronunciaron. En el parte oficial detallan que el convoy fue atacado con cohetes y explosivos caseros.
Más detalles en el siguiente video: