Las Fuerzas Armadas de Perú continuaron las evacuaciones aéreas de las poblaciones que han quedado aisladas tras el terremoto de 7,5 grados ocurrido el domingo.
Como resultado del sismo, un niño falleció, 12 personas resultaron heridas y más de 2.600 damnificadas.
En esta jornada los helicópteros de la Fuerza Aérea centraron sus esfuerzos en trasladar a los habitantes del caserío de Caccha a la ciudad de Bagua.
El punto de mayor preocupación continúa en la zona de Aserradero, donde el deslizamiento de un cerro causó un embalse del río Utcubamba.
En estos puntos se dificulta la evacuación por vía terrestre al destruirse varios sectores de las principales carreteras de la zona.
Tras dos intensos días de evaluación de los daños causados por el terremoto, el Gobierno declaró en emergencia por 60 días a 53 municipios.
Así se espera acelerar la recuperación de estas zonas, donde además de las víctimas también hay cuantiosos daños materiales en infraestructura.
Según el último balance de daños, hay 117 casas destruidas y otros 376 inmuebles han quedado inhabitables. Otras 764 casas presentan desperfectos.
Quedaron destruidas 5 iglesias y un centro de salud, y con daños menores quedaron otros 19 templos religiosos y 32 establecimientos sanitarios, así como 13 escuelas.
La única víctima mortal del evento sísmico es un niño de 3 años que falleció aplastado por maderas al derrumbarse una casa.