Desde hace varias décadas la ciencia ha comprobado que las relaciones íntimas tienen muchos beneficios para la salud de hombres y mujeres.
Sin embargo, expertos de la Universidad de Berlín encontraron un dato revelador, que las mujeres que tienen más sexo tienen cerebros más desarrollados.
El impacto de las relaciones íntimas en las mujeres
Este curioso hallazgo fue comprobado con complejos estudios de imágenes cerebrales obtenidas a través de resonancias magnéticas de mujeres voluntarias.
Los investigadores identificaron la región del cerebro relacionada con la estimulación de los genitales femeninos y observaron los cambios que la práctica sexual genera en dicha zona.
Para ello, examinaron la conexión entre el desarrollo cerebral y el tacto genital en 20 mujeres voluntarias de entre 18 y 45 años de edad que experimentaron estimulación clitoriana mediante un pequeño vibrador redondo colocado en su ropa interior, al tiempo que su cerebro era escaneado por los investigadores de diversas instituciones académicas y de salud alemanas.
El vibrador se activó ocho veces, durante 10 segundos cada vez con 10 segundos de descanso. Con este método, los expertos obtuvieron imágenes de resonancia magnética funcional de cada una de las participantes, que también respondieron varias preguntas sobre la frecuencia con que habían mantenido relaciones sexuales durante un año.
Un estudio científico que permite entender la «plasticidad del cerebro»
Los autores de la investigación, publicada en el Journal of Neuroscience, encontraron que la llamada corteza somatosensorial del cerebro se activaba cada vez que el vibrador se encendía.
Esta región cerebral también resultó ser más gruesa en las mujeres que informaron tener más sexo.
La corteza somatosensorial del cerebro es un área especializada en recibir e interpretar la información sensorial que recibimos a través de la piel, los músculos y las articulaciones, es decir que interpreta las sensaciones de temperatura, dolor, textura o presión, pero también recibe y transmite la información relacionada con la posición que guarda nuestro cuerpo respecto al espacio circundante.
Los investigadores creen que tener relaciones sexuales de manera frecuente puede expandir más esa zona del cerebro debido a la llamada “plasticidad cerebral”, que es la capacidad de este órgano de desarrollar ciertas regiones en función de la frecuencia con que se utilicen.
Además, creen que este tipo de investigaciones pueden ayudar a mujeres que tienen problemas de desempeño sexual por diversas causas.
“Nuestros resultados allanan el camino para futuras investigaciones sobre la plasticidad de la corteza genital humana como una función de la experiencia normal o adversa, así como los cambios en las condiciones patológicas, es decir, disfunción sexual, desviación sexual o comportamiento sexual de riesgo”, escribieron los expertos alemanes.
Mire también
Guayas y Pichincha encabezan el listado con 33 y 30 casos, respectivamente https://t.co/Z06yscvmu0 pic.twitter.com/Y9c3s4mf9l
— Teleamazonas (@teleamazonasec) January 3, 2022