El médico Esteban Ortiz, especialista en salud pública y global, nos acompañó en Los Desayunos de 24 Horas para analizar la situación que enfrenta Quito por la pandemia.
Esteban Ortiz dijo que la situación de la capital es un poco diferentes a la del resto del país. Porque en Quito se llevaron acabo medidas de contención muy fuertes al inicio del brote. Lo cual provocó un retraso de cuatro o tres semanas para conocer el comportamiento del virus y una ralentilización de los casos.
«En Quito al tener esas medidas de confinamientos se disminuyó la velocidad de transmisión». Por lo que a pesar de que «tuvimos casos que iban aumentando, el crecimiento era relativamente sostenido y pausado», añadió Ortiz
Además, respecto a la capacidad hospitalaria explicó que «los hospitales están al 100%. En realidad las camas fueron insuficientes». Pues tanto las unidades de cuidados intensivos como las camas de cuidados intermedios están al límite por la demanda.
Esta situación, según Ortiz, se debe a que los pacientes con COVID-19 que necesitan atención hospitalaria tienden a permanecer por un largo tiempo en el centro médico, por lo cual la desocupación de camas es muy lenta.
Sin embargo, Ortiz manifestó que pese a que la disminución de la transmisión a nivel epidemiológica disminuyó, el recambio de las camas obliga a pensar que en un futuro muy cercano tendremos que buscar una opción para atender a los pacientes.
En este marco, Ortiz hace un llamado a la ciudadanía para actuar con responsabilidad frente a la pandemia. Pues la irresponsabilidad en el cambio de semáforo no solo puede afectar al incremento de casos sino también al aumento de emergencias, como accidentes de tránsito, que pueden provocar una saturación en los hospitales.
Finalmente, aseveró que si la situación empeora deberíamos volver al confinamiento. Y por lo menos serían dos meses para tratar de liberar las terapias intensivas.
Más detalles sobre la situación que enfrenta Quito por la pandemia en el siguiente video: