El sistema de cobro de multas por infracciones de tránsito en el Distrito Metropolitano de Quito genera situaciones injustas e incluso ilegales, al obligar a ciudadanos que asuman faltas cometidas por otras personas. Así le ocurre a Enrique Lozano, un quiteño que debe pagar cerca de 600 dólares por dos infracciones que él jamás cometió.
Los detalles en el siguiente video: