Este viernes, empleados públicos protestaron por el cierre de empresas dentro de la decisión gubernamental frente a la crisis económica generada por la COVID-19.
Los empleados de Tame expresaron su rechazo y pidieron liquidaciones y pagos justos. En Tame, los empleados están impagos desde hace tres meses. Muchos de ellos mostraron su indignación porque el país pierde la única aerolínea ecuatoriana. Sin embargo, la aerolínea arrastra pérdidas, solo en este 2020, de USD 7,1 millones.
Los trabajadores de Tame no fueron los únicos empleados públicos protestaron por el cierre de las empresas. Pues Los empleados de Correos del Ecuador y Servicio de Contratación de Obras (SECOB) también se manifestaron
Correos del Ecuador es una de las siete empresas públicas que, vía decreto, será eliminada. La empresa el próximo mayo iba a cumplir 190 años pero no llegará el día y quizás antes se la concesione al sector privado.
Andrés Michelena, explicó en un comunicado que Correos del Ecuador no dejará de funcionar ni de cumplir con sus tareas. Sino que sus competencias se trasladarán (mediante un concurso público de concesión, abierto y transparente), a la administración de una empresa privada que tenga la suficiente capacidad y solvencia técnica y financiera para gestionar todos los servicios postales.
Los empleados dijeron estar siendo afectados y aseguraron que la empresa si puede ser sustentada.
Mientras que las funciones del Servicio de Contratación de Obras (SECOB) estarán a cargo del Ministerio de Transporte y Obras Públicas. Al igual que el resto de empresas afectadas los trabajadores aseguran quedar desprotegidos.
La Empresa Coordinadora de Empresas Públicas (EMCO) coordina el cierre y liquidación de las compañías. Lo que según ellos significará un ahorro en gasto de USD 230 millones.
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