Militares vuelven a las calles de Guayaquil y refuerzan las fronteras. Además, se suman 1 100 policías al control de la delincuencia en la Zona 8
Estas son algunas de la medidas dispuestas por el presidente Guillermo Lasso este domingo para combatir la inseguridad en Guayaquil.
Cambio de la máxima autoridad de la Policía
Lasso anunció el cambio de la máxima autoridad de la Policía, en momentos en que ha aumentado la inseguridad en diversos sectores.
En declaraciones a la prensa, el gobernante aseguró que el general Carlos Cabrera reemplazará a Tannya Varela, quien se había convertido en la primera mujer en dirigir la institución policial.
«He resuelto agradecer los servicios de la comandante Tannya Varela, una ejemplar funcionaria pública y oficial de la Policía. Fue la primera mujer comandante», recordó Lasso.
Varela deja el cargo en momentos en que se han reportado varios hechos violentos, como el ocurrido la noche del pasado viernes cuando una veintena de individuos dispararon contra un grupos de ciudadanos, matando a cinco de ellos.
Reforzar medidas
Ante el aumento de la inseguridad, que el gobernante atribuye en parte a la lucha contra el narcotráfico, dispuso que el viceministro de Gobierno a cargo de la seguridad ciudadana, Max Campos, tenga su base en Guayaquil, desde donde dirigirá la seguridad ciudadana del país.
Entre sus primeras acciones, Campos coordinará la presencia de 1.100 policías, que reforzarán las operaciones de lo gendarmes que se encuentran en Guayaquil.
Igualmente, coordinará los operativos de las Fuerzas Armadas en las calles en esa ciudad desde este domingo.
Lasso dispuso, además, que los militares refuercen el control fronterizo para «evitar el ingreso de drogas desde el norte o de armas desde el sur».
E informó de que se destinarán nueve millones de dólares para equipar a la Policía en Guayaquil.
Reformas legales
Por otra parte, Lasso avanzó que el próximo martes presentará a la Asamblea Nacional un proyecto de ley que regule el uso de la fuerza; y reforme varios cuerpos legales para el fortalecimiento de la seguridad ciudadana y la lucha contra el crimen trasnacional.
Entre los principales objetivos del proyecto de ley figura el «autorizar el uso progresivo de la fuerza respaldando a los policías y militares», indicó.
Asimismo propondrá la reformará la Ley de Seguridad Pública y del Estado para mejorar la cooperación entre las Fuerzas Armadas y la Policía Nacional sin esperar estados de excepción.
El proyecto de ley busca asegurar que los servidores policiales y militares tengan el patrocinio legal del Estado cuando son sujetos a investigaciones o juicios por el cumplimiento de sus funciones.
«Que no pase lo del cabo Santiago Olmedo, que tiene que asumir el costo de su defensa», dijo en referencia a un policía sentenciado el pasado miércoles a tres años y cuatro meses de prisión por matar a dos delincuentes en medio de un robo armado en la ciudad de Riobamba, por un delito de extralimitación en el uso de la fuerza.
Con información de EFE