Una de las series de televisión más famosas en Estados Unidos, «Keeping Up with the Kardashians», se despidió luego de 20 temporadas en la pantalla chica. El programa que catapultó a la familia Kardashian-Jenner a la fama hizo su reverencia final con abrazos, lágrimas y gratitud.
Su estreno llegó en 2007 y su producción no tenía el presupuesto adecuado para sostener las excentricidades de la familia. Con la gran acogida en televisión abierta, el proyecto contempló nueve spin-offs, los cuales abarcaron 18 temporadas adicionales y 440 episodios en total.
El reality siguió el matrimonio de Kim Kardashian con el rapero Kanye West y la transición de género de Caitlyn Jenner. «No me arrepiento. Esta fue, como, la mejor década y media de mi vida», dice Kim Kardashian en el final del programa.
Entre las caras más reconocidas del programa también se encuentra Kendall y Kylie Jenner; quienes ahora tienen sus propias líneas multimillonarias de cosméticos, perfumes, cuidado de la piel y ropa, gracias al reality. Se espera que la familia regrese para una reunión de dos partes el 17 y 20 de junio. Además tendrán una nueva serie en la plataforma de transmisión Hulu, cuyo estreno todavía es incierto.
Fuente | Reuters/NPR.org