Un aneurisma aórtico podría resultar ser un cuadro fatal para quien lo padece y si bien no presenta síntomas, este test fácil podría dar una pista.
Investigadores de la Universidad de Yale desarrollaron un estudio que concluyó que un simple ejercicio con la mano podría dar luces sobre una condición cardiovascular grave.
Se trata de un aneurisma aórtico ascendente, una dilatación de las arterias principales del cuerpo humano que puede resultar fatal para quien lo padece. El problema es que por lo general este cuadro no presenta síntomas.
Pero gracias a este estudio, publicado en The American Journal of Cardiology, todos pueden hacer un simple examen con su mano para saber si podría padecer de un aneurisma aórtico.
Según el portal de noticias RT, » Basta con extender la mano con la palma hacia arriba y alargar lo más que se pueda el pulgar en dirección al dedo meñique. Que el pulgar llegue hasta el centro de la mano es lo normal. Sin embargo, cuando cruza el borde de la misma, podría tratarse de un signo de un aneurisma aórtico».
All in favor of a test for aortic aneurysms, raise your hand@YaleMed https://t.co/zjKKuYcV8U
— Yale University (@Yale) May 25, 2021
Los investigadores encargados del estudio indican que poder mover el dedo pulgar de esa forma podría ser un indicio de que las articulaciones están laxas, es decir que carece de rigidez, o que sus huesos largos están demasiado estriados, lo que podría ser un signo de una enfermedad del tejido conectivo, incluida la aorta.
Según el portal de noticias RT, «Para la investigación se estudiaron los casos de 305 pacientes que fueron sometidos a cirugías cardíacas por aneurisma ascendente, reparación de válvulas o injerto de derivación de la arteria coronaria».
Si bien no todos los pacientes que participaron en la investigación y que tenían el diagnóstico de aneurisma ascendente padecían el trastorno, los expertos sostienen que aquellos que logran mover el dedo por encima de la palma y salir del límite de la mano, tienen un alta probabilidad de sufrir esta condición.
Lo más aconsejable es mantener las visitas al médico de forma regular con la finalidad de evitar problemas graves.