La asociación empresarial Confesercenti denunció este lunes que el brote del coronavirus, que afecta sobre todo al norte de Italia, causará un daño de 5.000 millones en el consumo del turismo en el país solo en el primer semestre del año.
Confesercenti, que representa a las empresas italianas en comercio, turismo, artesanía y pequeña industria, calcula que esta pérdida se producirá si la situación se controla a corto plazo, pero si no las pérdidas serán mucho mayores.
Solo en marzo y abril, el consumo del turismo se verá afectado en 4.000 millones de euros, apunta en el comunicado.
La asociación muestra su preocupación y sostiene que, «si no hay un cambio», la economía italiana sufrirá una contracción del 0,3 % y en términos absolutos el producto interior bruto (PIB) tendrá una pérdida de 8.000 millones de euros.
El miedo por la propagación del virus y las medidas preventivas que está adoptando el Gobierno, como aislar por decreto a 16 millones de personas en la región de Lombardía y en 14 provincias italianas, derivarán en una reducción de las inversiones por valor de 3.000 millones.
Se han cerrado museos, cines, teatros, escuelas y universidades, y se ha paralizado temporalmente la actividad productiva en algunas fábricas en esta zona aislada del norte del país, en la que 350.000 empresas se dedican a la hostelería, a la restauración y al comercio minorista.
«Si la crisis continúa durante todo el año, entre el 8,8 % y el 13,4 % de estas compañías corren el riesgo de cerrar», avisa la asociación italiana, al tiempo que señala que una propagación del virus a nivel nacional, sin que sea controlado en unos meses, amenaza la continuidad de «30.000 empresas y más de 120.000 empleos» en Italia.
El sector hotelero es uno de los que más se ve penalizado por esta situación y el 40 % de las reservas para febrero y abril han sido canceladas en Roma, el 80 % en Venecia, el 53 % en Florencia y el 77 % en Milán, se lee en la nota.
Pero no es el único que se resiente, también el transporte aéreo se ve afectado por las cancelaciones y aerolínea irlandesa de bajo coste Ryanair informó este lunes de que llevará a cabo nuevos recortes en su programación de vuelos hacia, desde y dentro de Italia, mientras que Alitalia ha reducido drásticamente los vuelos desde y hacia Milán Malpensa.
Otro sector afectado por el coronavirus es la moda y firmas como Armani, Versace, Gucci y Prada ya han cancelado varios desfiles programados en distintas partes del mundo entre marzo y junio.
El Gobierno italiano ha aislado a 16 millones de personas en el norte del país, pero no ha impedido la circulación de mercancías, algo que ha celebrado la patronal italiana, que ha dicho que es fundamental para la economía de Lombardía, Véneto y Emilia Romaña, que juntas representan el 40 % del PIB italiano.
«Una disminución temporal de las actividades en algunos sectores es preferible a una crisis prolongada que correría el riesgo de expandirse a todos los sectores de la economía a través de los efectos de la oferta y la demanda», ha justificado este lunes el Ministerio de Economía en una nota.
«Las medidas restrictivas» en relación a Lombardía y las 14 provincias del norte «tendrán un impacto en las actividades económicas relacionadas con el transporte, el entretenimiento y la vida social», pero las «actividades de producción y la Administración pública continuarán funcionando regularmente», ha añadido.
El Instituto Nacional de Estadística de Italia advirtió este lunes de que la expansión del coronavirus «debilita las perspectivas de crecimiento económico» y tendrá seguramente «un impacto desfavorable en el mercado laboral» italiano.
Según los últimos datos de Protección Civil, el coronavirus ha causado ya en Italia 463 muertos y 7.985 personas están actualmente contagiadas. EFE