Ecuador trasladó a Quito a un ciudadano peruano y nueve colombianos en su tercer y último vuelo de repatriación.
Llegó este lunes con 189 personas a bordo, entre ellas 143 ecuatorianos y 32 ucranianos, según confirmó la Cancillería.
El ministro de Relaciones Exteriores de Ecuador, Juan Carlos Holguín, indicó que un total de 711 personas que huyeron de Ucrania han logrado llegar a Ecuador.
En los tres vuelos humanitarios que organizó la Cancillería, así como en un vuelo fletado por los propios migrantes.
En total, Ecuador ha facilitado el retorno de 655 ecuatorianos, 43 personas de nacionalidad ucraniana, once colombianos, un peruano, un egipcio y un bielorruso.
Asimismo, informó de que 106 ecuatorianos que huyeron de Ucrania han decidido quedarse por su cuenta y riesgo en Polonia, 30 en Hungría, 17 en Eslovaquia, 13 en Rumanía, 4 en Moldavia y 16 en Rusia, así como 14 en España, 9 en Turquía y 5 en Alemania.
53 ECUATORIANOS SIGUEN EN UCRANIA
Incluso el canciller mencionó que un ecuatoriano pudo llegar a Estados Unidos y que son 53 los compatriotas que aún permanecen en Ucrania por su propia decisión.
Holguín remarcó que el de este lunes fue el último vuelo humanitario organizado y lamentó de que muchos compatriotas hayan decidido quedarse en Ucrania, en países vecinos y otras naciones europeas, en lugar de volver al país de forma segura.
«Hemos logrado el objetivo de traer a la mayoría de ecuatorianos» que se habían registrado en Ucrania, y que ronda la cifra de 870, una cantidad importante que se constituye en el mayor colectivo de entre los países latinoamericanos.
Aseguró que quienes han decidido no volver, asumirán las consecuencias de tal decisión, aunque precisó que la Cancillería ecuatoriana mantendrá su atención en la zona a través de las delegaciones diplomáticas en Austria y Hungría, además de gestionar la reapertura de su Embajada en Polonia.
FRACASÓ EXTRACCIÓN DE ECUATORIANO EN SHOSTKA
Holguín mencionó también que su Gobierno ha asignado una especial importancia al caso de un joven ecuatoriano, Diego Moncayo, que se encuentra atrapado en Shostka, una ciudad de alto riesgo de combates en el este de Ucrania, y que no ha podido salir de la zona, pese a haberlo intentado en varias ocasiones.
Holguín se lamentó de que haya fracasado en las últimas horas un intento por evacuar al ecuatoriano, tras cerrarse un corredor humanitario para evacuar a extranjeros y civiles de la zona de Sumy, cerca de la frontera con Rusia.
«Hemos tenido que detener el proceso de extracción» de Diego, mientras que organismos internacionales como la Cruz Roja han aconsejado que él se quede donde está, añadió Holguín.
CADA DÍA, DIEGO CORRE MÁS RIESGO
De su lado, la madre de Moncayo, Jeaneth Mendoza, también expresó su pena por haber fracasado el intento de evacuación de su hijo.
«Cada día que pasa para nosotros es más complicado, porque Diego corre más riesgo» y esta demora podría «complicar más el salir de allí», señaló Mendoza que mantiene un contacto por móvil permanente con su hijo.
Según relatos de Diego, en las últimas horas cambió la situación de aparente tranquilidad en Shostka, debido a que se activaron las alarmas.
Su hijo habría tenido que ir a un refugio, tras escuchar las alertas de bombardeo, aunque no había ocurrido nada; pero en una segunda ocasión ya se escucharon algunos tiroteos.
A este joven ecuatoriano le sorprendió la guerra en Kiev, de donde huyó al inicio la invasión rusa a Ucrania, pero se equivocó de tren y terminó en Sumy, en plena zona del conflicto, de donde escapó de milagro y se refugió en la casa de una amiga suya en la vecina Shostka, de donde no ha podido salir.