Kenzo Takada, el emblemático diseñador de moda franco-japonés famoso por sus diseños con toques selváticos y una estética libre que representaba sus viajes por el mundo, falleció. Tenía 81 años.
Takada murió de complicaciones de COVID-19 en un hospital en Neuilly-sur-Seine, cerca de París, dijo su familia el domingo a medios franceses en un comunicado. Un representante de la marca Kenzo confirmó el deceso, pero sin proporcionar una causa de su muerte.
“Con inmensa tristeza KENZO se ha enterado de la muerte de su fundador”, dijo la casa de modas en un comunicado. “Durante medio siglo, el señor Takada ha sido una personalidad emblemática en la industria de la moda, siempre inyectando creatividad y color en el mundo”.
La muerte de Takada ocurrió al final de la Semana de la Moda de París, cuyo programa de nueve días presenta una temporada inusual primavera-verano 2021 debido a la pandemia de coronavirus. Hace apenas unos días la casa Kenzo presentó una colección con temática de abejas.
Aunque Takada se había retirado de la casa en 1999 para dedicarse a una carrera en el arte, Kenzo se mantiene como una de las marcas más respetadas de la alta costura en París. Desde 1993, la marca de Kenzo es propiedad del conglomerado de lujo francés LVMH.
“Su increíble energía, amabilidad, talento y sonrisa eran contagiosos”, dijo el director artístico de Kenzo, Felipe Oliveira Baptista, quien presentó la colección de abejas a editores de moda el miércoles. Su espíritu “vivirá por siempre”, agregó.
Los diseños de Kenzo eran conocidos por sus colores vibrantes, estampados impresionantes y estaban inspirados en sus viajes por el mundo.
“Desde la década de 1970, Kenzo Takada ha infundido en la moda un tono de ligereza poética y libertad dulce que ha inspirado a muchos diseñadores después de él”, dijo Bernard Arnault, presidente y director ejecutivo de LVMH.
Takada nació el 27 de febrero de 1939 en Himeji, en la prefectura de Hyogo en Japón, hijo de padres hoteleros. Pero tras leer las revistas de moda de su hermana, su amor por la moda comenzó.
Estudió en el Colegio de Moda Bunka en Tokio y trabajó brevemente en Japón antes de mudarse a París en 1965 para trabajar como diseñador independiente.
En París, se hizo cargo de una boutique en 1970 y cristalizó su estética futurista de confección inspirada en sus adornos por las escenas selváticas de las pinturas de Henri Rousseau, que mezcló con estilos asiáticos. Sus diseños se volvieron influyentes.
Pero sus inicios fueron modestos. La primera colección de Takada estaba realizada completamente de algodón porque tenía poco dinero. Sin embargo, la ropa habló por sí misma y uno de sus modelos apareció en la portada de la revista Elle. Poco después, sus formas innovadoras en los hombros, sus grandes aperturas en los brazos, overoles y vestidos con forma de bata hicieron que su tienda fuera incluida en la edición de Vogue de Estados Unidos. Para 1971, Kenzo presentó colecciones en Tokio y Nueva York.
Yves Saint Laurent fue una de sus grandes inspiraciones, Takada solía decir. Con él compartía la afición a la teatralidad. En 1978 y 1979, Kenzo presentó sus desfiles en una carpa de circo y apareció montado en un elefante, mientras artistas montaban a caballo con uniformes transparentes.
En sus tres décadas al frente de su casa, el amor por los viajes y el uso de sus influencias étnicas fueron una constante.
Su contribución al estilo fue significativa. Apoyaba una estética juvenil y las formas no estructuradas, se deshizo de las cremalleras para liberar las siluetas. Su sello eran las mangas anchas y grandes aperturas en los brazos que remitían a estilos históricos asiáticos.