Leo Messi anunció que seguirá una temporada más en el Barcelona, pero si no hay ninguna novedad lo hará sin renovar. Eso origina un panorama contractual que augura nuevas tensiones entre el jugador y el club a medida que avance el año restante.
Su contrato con Barcelona finalizará el 30 de junio de 2021 y Messi, si persiste en separarse del club, podrá negociar a partir de enero. Irse libre en verano es algo que muchos clubes querrán aprovechar.
Entonces el Barça no podrá aferrarse a la cláusula de rescisión de 700 millones de euros ni pretender negociar traspaso alguno.
Desde el punto de vista contractual, el jugador argentino tendrá toda la libertad del mundo para informar de su marcha al nuevo club cuando le parezca más conveniente, sin que la fecha del 10 de junio tenga ya seguro ninguna validez.
Un futuro a partir de enero
«Ahora voy a seguir en el club porque el presidente (Josep Maria Bartomeu) me dijo que la única manera de marcharme era pagar la cláusula».
Sobre pagar 700 millones de rescisión, dijo que «eso es imposible». Pero Bartomeu afirmó que había otra manera de salir «que era ir a juicio. Y jamás iría a juicio contra el club de mi vida», dio Messi como motivo de su continuidad en el Barcelona.
«No vino a causa del resultado de ‘Champions’ ante el Bayern. La decisión llevaba pensándola mucho tiempo. Se lo dije al presidente y bueno, el presidente siempre dijo que al final de temporada podía decidir si me quería ir o quedar. Al final no terminó cumpliendo su palabra», añadió el seis veces Balón de Oro.
Un 2021 que tendrá mucho de qué hablar
En 2021 ninguna de las posturas antes mencionadas servirá por parte del club para retener a Messi más tiempo en el Barcelona.
Todo esto tiene lugar con unas elecciones a la presidencia del club convocadas para el primer fin de semana con partido en el Camp Nou después del 15 de marzo y con una moción de censura en marcha.
Así, serán los precandidatos a los próximos comicios quienes tendrán que convencer a Messi de quedarse más tiempo. Ellos deberán mostrar al jugador proyectos tan ilusionantes como para que el argentino vuelva a desear acabar su carrera de azulgrana.
Otra opción es que la llegada de Ronald Koeman en el banquillo consiga relanzar el proyecto deportivo del Barcelona. Así, cuando llegue enero, a Messi se le podría olvidar su pretensión de marcharse. Pero ahora mismo parece una utopía. EFE
Messi: "Jamás iría a juicio contra el club de mi vida. Por eso me voy a quedar en el Barcelona" https://t.co/ynFuBlEeuR pic.twitter.com/kRlmQlPSzE
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