Es suave y a la vez crocante. Sabe a memoria, a playa y tradición.
Ya sea con su típico relleno de albacora o dejándose acompañar por tentadores ingredientes, no hay quien se resista.
Y si de sorprender se trata no hay límites para quienes tienen en sus manos la fortuna de amasar todo su sabor.
Esos expertos nos revelan sus trucos, secretos y el toque personal que le han puesto a la preparación de los corviches.