Corea del Norte informó hoy de 213.280 nuevos casos sospechosos de covid y un nuevo fallecimiento aparentemente ligado a la enfermedad.
Con estos datos del centro estatal de prevención epidémica, son ya 63 los fallecimientos aparentemente ligados al virus.
A su vez, 1,97 millones de norcoreanos han contraído ya «fiebres», el término que emplea Corea del Norte para los casos sospechosos ante su falta de capacidad para realizar test.
De esta cifra, que supone prácticamente un 8 % de la población total, en torno a 1,23 millones se han recuperado satisfactoriamente.
Unos 740.160 están actualmente bajo tratamiento, detalló KCNA.
Las cifras están mostrando una transmisión muy rápida por todo el país y a su vez una tasa de mortalidad excesivamente baja.
En comparación con la mayoría de países que han sufrido el embate de la variante ómicron detectada por las autoridades norcoreanas.
Esta misma semana la Organización Mundial de la Salud (OMS) mostró su preocupación por la situación en Corea del Norte.
Pidió al régimen compartir información más detallada para poder asistir durante la crisis sanitaria.
La situación en el empobrecido país preocupa por lo contagiosa que ha demostrado ser la subvariante ómicron.
En ese sentido, Corea del Norte ha hecho por el momento oídos sordos a los ofrecimientos de ayuda, incluyendo vacunas, de Corea del Sur y de la OMS.
Varios medios han informado de aviones norcoreanos cargando suministros en aeropuertos chinos, mientras que Moscú y Pionyang trataron esta semana directamente el envío de ayuda.
Muchos expertos creen, sin embargo, que Corea del Norte, que lleva cerrada a cal y canto desde 2020, no aceptará de momento el envío de vacunas porque implica recibir personal externo que asesore las cadenas de frío para distribuirlas.