Una investigación, pendiente de revisión para publicarse en la revista Acoustical Society of America, concluyó que la pandemia de covid-19 ayudó a disminuir la contaminación acústica.
Este tipo de contaminación sonora en las aguas abiertas afectan a la vida tranquila de los animales marítimos, como las ballenas.
El estudio contó con el análisis del ruido en las aguas de dos puntos próximos al puerto de Vancouver, Canadá, y demostraron que los ruidos de baja frecuencia, relacionados con las embarcaciones, se redujeron en gran medida.
David Barclay, coautor del estudio, indicó que la reducción de la contaminación acústica en esas aguas se registra desde enero, cuando al mismo tiempo las exportaciones marítimas de Canadá, también cayeron.
Según RT, » Por su parte, la ecóloga marina Michelle Fournet, de la Universidad de Cornell (EE.UU.), afirmó que el ruido de los barcos está relacionado con el estrés crónico y la disminución de la comunicación en algunos cetáceos y recordó que hay generaciones de ballenas jorobadas que «nunca han conocido un océano tranquilo»».