El envejecimiento es un proceso natural de la vida, pero, a menudo, está acompañado de desafíos para la salud mental como la depresión. Esta es una de las enfermedades más comunes en los adultos mayores.
Un reciente estudio realizado por la Facultad de Medicina de la Pontificia Universidad Católica del Ecuador (PUCE) determinó que hay varios factores que aumentan el riesgo de que un adulto mayor desarrolle la enfermedad.
Este estudio descriptivo se basó en datos de la Encuesta de Salud, Bienestar y Envejecimiento SABE de Ecuador. Participaron 5.235 adultos mayores con una edad media de 72 años, el 55% fueron mujeres.
Brenda Pillajo, una de las investigadoras, explica que los adultos mayores de 80 años tienen un mayor riesgo de sufrir depresión. Una de las causas sería la carga de enfermedades, la jubilación y la pérdida de seres queridos. Esto contribuye a experimentar sentimientos de soledad y disminución del bienestar.
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Además, los adultos mayores que perciben su salud como mala tienen una mayor probabilidad a desarrollar esta enfermedad. Además, el dolor constante y las limitaciones físicas pueden afectar negativamente el estado de ánimo y la calidad de vida de una persona mayor.
“Esta percepción negativa puede estar influenciada por la pérdida de independencia y el aislamiento social. También, por la disminución de la capacidad para realizar actividades cotidianas”, sostiene Pillajo.
Otro factor relacionado es la sensación de soledad. Por ello, es importante las interacciones con otras personas ya que proporcionan apoyo emocional, estimulación mental y una sensación de pertenencia. Cuando una persona mayor vive o se siente sola, pierde estas fuentes de apoyo.
La soledad también puede relacionarse con el abuso y la negligencia. Las personas mayores que viven solas pueden ser más vulnerables al abuso emocional, físico o financiero. La falta de interacción regular con otros puede dificultar la detección de estos problemas y la obtención de ayuda.
La investigación subraya la relevancia del apoyo social y la interacción con personas de la misma edad. La experta enfatiza en la importancia de que los adultos mayores mantengan relaciones sociales significativas para mejorar su salud mental.
Consejos para evitar la depresión en adultos mayores
- Fomentar la Actividad Física
La actividad física ayuda a liberar endorfinas, que son hormonas que mejoran el estado de ánimo. Caminatas diarias, clases de baile, yoga o natación son excelentes opciones que, además de mejorar la salud física, contribuyen al bienestar mental.
- Mantener una Vida Social Activa
La soledad y el aislamiento son factores de riesgo importantes para la depresión en los adultos mayores. Fomentar la vida social es crucial. Participar en clubes, grupos comunitarios, actividades religiosas o simplemente mantener contacto regular con amigos y familiares puede hacer una gran diferencia.
- Estimulación Cognitiva
Mantener el cerebro activo es fundamental para prevenir la depresión. Los adultos mayores deben participar en actividades que desafíen su mente, como leer, resolver crucigramas, aprender un nuevo idioma o instrumento musical. Los juegos de mesa son opciones que pueden ser tanto divertidas como estimulantes.
- Alimentación Saludable
Una dieta equilibrada rica en frutas, verduras, proteínas magras y granos enteros puede tener un impacto positivo en el estado de ánimo. Algunos nutrientes, como los ácidos grasos omega-3, las vitaminas del complejo B y la vitamina D, están especialmente vinculados a la salud mental. Evitar el exceso de azúcares y alimentos procesados también es crucial.
- Sueño de calidad
El sueño de calidad es esencial para la salud mental. Los adultos mayores deben mantener una rutina de sueño regular, evitando las siestas prolongadas durante el día y creando un ambiente propicio para el descanso en la noche. Dormir bien ayuda a regular las emociones y mejorar el estado de ánimo.
- Acceso a Apoyo Psicológico
Tener acceso a un profesional de la salud mental es vital para quienes están en riesgo de depresión o ya están experimentando síntomas. La terapia cognitivo-conductual y otras formas de psicoterapia pueden ser muy efectivas. Además, participar en grupos de apoyo donde puedan compartir experiencias y sentimientos con otros en situaciones similares puede ser muy beneficioso.
- Revisiones Médicas Regulares
Algunas condiciones médicas y ciertos medicamentos pueden contribuir a la depresión. Es importante que los adultos mayores realicen revisiones médicas regulares para detectar y tratar cualquier problema de salud subyacente. Los médicos también pueden ajustar medicamentos que podrían estar afectando negativamente el estado de ánimo.
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