Las primeras versiones de Mayra Alexandra T. P., madre del niño, y David Antonio R. T., padrastro, señalaban que la víctima estaba enferma. Sin embargo, una investigación determinó que el pequeño de 4 años sufrió una muerte violenta.
Este martes 13 de septiembre del 2022 la Fiscalía informó que la pareja fue condenada con pena agravada de 34 años y 8 meses como autores directos del asesinato del niño de 4 años, quien tenía perforación de intestino delgado causada por un traumatismo abdominal cerrado por objeto contundente, ataques de puño y puntapiés, además de huellas de golpes previos.
Fiscalía apeló y consiguió la pena máxima
En primera instancia, Mayra Alexandra y su pareja David Antonio fueron sentenciados a 8 años y 4 meses de cárcel «como responsables del homicidio preterintencional de su hijo de 4 años, en junio de 2021».
Sin embargo, el fiscal de la Unidad de Personas y Garantías, Fernando Casco, apeló la resolución del Tribunal de primer nivel, fundamentando que se trataría de un asesinato y que las pruebas presentadas justificadas por la Fiscalía lo demuestran.
En ese contexto, la Sala Penal de la Corte Provincial de Justicia de la provincia de Tungurahua acogió el recurso motivado y resolvió declarar la culpabilidad de los mencionados ciudadanos «como autores directos en el delito de asesinato».
Un desenlace cruel
Los hechos se registraron entre el viernes 4 y el sábado 5 de junio de 2021, en el sector La Magdalena de la ciudad de Ambato, la capital provincial de Tungurahua.
David Antonio R. T. «golpeó al niño de 4 años, lanzándolo al suelo, porque no habría querido comer. Además, días atrás, varios vecinos observaron como la madre del niño lo jaloneaba bruscamente», señaló la Fiscalía.
Al día siguiente, la madre salió a trabajar, dejando solo al infante con su pareja, quien se encontraba en estado etílico. Cuando la mujer regresó encontró a su hijo muerto, por lo que llamó al ECU 911.
Maltratos frecuentes
«Los testimonios confirmaron que los maltratos perpetrados al infante fueron frecuentes, entre encierros, falta de alimentación, suministración de medicina desproporcionada, lesiones y más. Ante esas agresiones, la madre del niño -con pleno conocimiento de los hechos- no hizo nada», anotó la Fiscalía.
Tanto la madre como el padrastro fueron aprehendidos el día de los hechos.
El delito de asesinato está tipificado en el Código Orgánico Integral Penal (COIP) y, aunque determina una pena de 22 a 26 años, se aplicaron las agravantes establecidas en el mismo cuerpo legal: Cometer la infracción en perjuicio de niñas, niños, adolescentes.
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EFE