Preparar los alimentos en barro es una experiencia que enriquece el proceso de cocción y sin duda realza los sabores pues se cocinan lentamente, por ello nuestros antepasados aprovecharon sus propiedades.
Se considera saludable siempre y cuando el barro haya sido curado, es importante verificar que las ollas, cazuelas o utensilios no tengan pigmentos de laca que podrían contener plomo y ser muy nocivos.
Hoy un experto nos explica cómo curarlos, también descubrimos algunos lugares en donde se preparan menestras, sopas, y carnes aprovechando la cocina en barro.