El delito no da tregua en Guayaquil. Ciudadanos piden que el combate a la inseguridad se vuelva una prioridad para el Gobierno, hoy concentrado sobre todo en temas políticos, según especialistas.
Las autoridades de Gobierno acumulan críticas por la falta de resultados en las acciones que se han tomado en Guayaquil para combatir la inseguridad en medio de una ola delictiva sin precedentes.
Los ciudadanos coinciden en que desde hace algún tiempo ya no se sienten seguros al recorrer la ciudad aquejada por niveles de violencia sin precedentes.
Pero a ese sentimiento se suma también una sensación de abandono, pues creen que poco o nada se ha hecho para combatir al delito común que hoy aterroriza las esquinas, el transporte público y los centros comerciales; sin mencionar la delincuencia organizada que controla barrios enteros, cárceles y algunos puertos.
El ex comandante general de la Policía, Patricio Carrillo, dice que el Gobierno comete un error al delegar la resolución de estos problemas y al no considerarlos de su directa competencia.
«Hay que romper el paradigma, llegar a la integralidad y pensar que esta es una política de Estado en donde todos debemos estar integrados», enfatiza Carrillo.
Al clamor ciudadano se suma a la prensa este domingo diario Expreso publicó un editorial titulado precisamente de esa manera. Sara España, editora de contenidos de este medio, señala que desde el Gobierno no se ha actuado con la contundencia que se esperaría.
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