El aeropuerto internacional de la ciudad de Cusco, meca del turismo mundial por Machu Picchu, suspendió por tiempo indefinido sus operaciones en prevención de ataques de los manifestantes que piden la renuncia de la presidenta peruana Dina Boluarte, anunció este jueves 12 de enero del 2023 el gobierno.
Las protestas contra el gobierno de Boluarte, que han cumplido un mes y dejan cerca de 50 muertos, se propagaron en el sur del país con nuevos enfrentamientos en la ciudad de Cusco, luego de la letal jornada registrada el lunes 9 de enero en la región Puno.
La gerencia regional de Salud de Cusco explicó que 37 civiles y seis agentes de policía resultaron heridos luego de que los manifestantes trataron de tomar el aeropuerto de la ciudad, un destino clave en el país por su atractivo turístico, especialmente la ciudadela inca de Machu Picchu.
La Defensoría del Pueblo, por su parte, indicó el miércoles que, desde diciembre, 39 civiles han muerto en choques con la policía y otros siete murieron en accidentes de tráfico y otros incidentes relacionados con los cortes de carreteras, además de un policía asesinado.
«El ministerio de Transportes y Comunicaciones informa que, como medida de prevención, Aeropuerto Internacional Alejandro Velasco Astete suspenderá temporalmente sus operaciones», indicó la institución en la red social Twitter.
La decisión se tomó ante el alto riesgo de que la terminal aérea sea tomada por asalto por miles de manifestantes que marchan por esta ciudad andina el jueves, tras un intento la víspera.
La terminal aérea es custodiada por policías y militares y es el segundo más utilizado en Perú. Los vuelos entre Lima y Cusco suman casi un centenar cada semana.
Durante las protestas del miércoles, cientos de pobladores, muchos campesinos, procuraron llegar al aeropuerto en el marco de una movilización para exigir la salida de la presidenta.
La policía recurrió a gases lacrimógenos para dispersar la multitud, que les lanzaba piedras con «huaracas» (hondas). El saldo: un dirigente campesino muerto y más de 50 heridos, entre ellos 19 policías, según la Defensoría del Pueblo.
Es la segunda vez que cierra el aeropuerto desde que estallaron las protestas hace poco más de un mes, que hasta el momento dejan al menos 42 muertos. En diciembre, la terminal aérea estuvo sin operar durante cinco días.