El Instituto Butantan, uno de los principales centros de investigación médica en Brasil, producirá anualmente hasta 100 millones de dosis de vacunas contra la covid-19 con las reformas que ya comenzaron a efectuarse en su planta en Sao Paulo, informó este lunes el gobernador paulista, Joao Doria.
«Será la primera fábrica de la vacuna (contra el nuevo coronavirus) en todo el continente americano » y este «es un día histórico para Sao Paulo y para Brasil», aseguró el gobernador durante una rueda de prensa en la que se explicaron los detalles del proyecto.
La vacuna que producirá el Instituto Butantan será la china, conocida como Coronavac, desarrollada por el laboratorio Sinovac, y los trabajos que permitirán que la planta fabrique en masa este antídoto estarán listos en septiembre de 2021.
En las próximas semanas llegará al centro Butantan, desde China, la materia prima para iniciar la producción de 40 millones de dosis, que, mientras terminan las reformas, podrá avanzar en otras fábricas del instituto ya en funcionamiento, indicaron las autoridades.
El director del Instituto Butantan, Dimas Covas, confirmó que el primer lote con insumos para fabricar 1,2 millones de vacunas llegará a más tardar el 27 de noviembre y el 6 de enero está prevista la entrega del último de los lotes restantes.
Otras 6 millones de dosis de la Coronavac llegarán listas desde el país asiático. El primer lote de 120.000 vacunas arribará a Sao Paulo el 20 de noviembre y, el segundo, el 30 de diciembre.
La Coronavac es desarrollada y experimentada en Brasil por la farmacéutica china Sinovac, en asociación con el Instituto Butantan, una institución científica vinculada al estado de Sao Paulo, el más rico y poblado del país.
El acuerdo suscrito entre Sinovac y Sao Paulo prevé la transferencia de tecnología de la vacuna, que podrá ser fabricada por el Instituto Butantan cuando esté registrada en Brasil.
No obstante, la producción en masa de la Coronavac y la vacunación de la población dependen del resultado final de los estudios clínicos del antídoto, el cual está en la tercera fase de las pruebas, con la que esperan comprobar su eficacia.
Según el director del instituto, los resultados finales, aunque son esperados para diciembre, «pueden conocerse en cualquier momento».