En medio de la crisis sanitaria provocada por el COVID-19, que parece no ceder, Brasil produjo ya el primer lote de la vacuna rusa Sputnik V.
La farmacéutica brasileña União Química fue la casa que produjo Sputnik V por primera vez en Brasil, que aún enfrenta una de las crisis más agravadas por la pandemia en América del Sur.
“Después de superar el procedimiento de control de calidad del Centro Gamaleya, la vacuna producida por União Química será exportada a otros países de América Latina para la lucha contra el COVID-19”, señala el comunicado del Fondo de Inversión Directa de Rusia.
Según el portal de noticias Infobae, » A principios de enero, el presidente de la farmacéutica, Fernando de Castro Marques, viajó a Rusia para visitar los centros de producción de Sputnik V. Entonces, ambas partes acordaron el suministro este año de 150 millones de dosis de Sputnik V al país latinoamericano».
Los resultados de Sputnik V son de lo más alentadores, con una eficacia superior al 90% y con una inmunidad generada en el organismo y que dura al menos 10 meses, según los estudios hechos en Rusia y los resultados obtenidos Argentina, país que fue de los primeros en América del Sur en administrar dicha inoculación.
La administración de una vacuna de manera masiva es la clave para que cada país salga de la crisis en la que el COVID-19 lo hundió, pero hay naciones, en especial en América Latina, en la que el proceso de inoculación avanza muy lento lo que provoca retrasos en una eventual vuelta a la normalidad.
En el caso de países como Israel incluso se eliminaron ciertas medidas restrictivas como el uso de mascarilla en lugares abiertos y también en restaurantes, solo se mantiene la obligación de usar un tapabocas en oficinas públicas cerradas.