Las autoridades sanitarias de la región boliviana de Santa Cruz, la mayor del país, informaron este viernes sobre dos casos sospechosos de viruela del mono.
Reciben asistencia preventiva y están bajo vigilancia epidemiológica mientras se confirma o descarta que se trate de la enfermedad.
Uno de los casos fue reportado en la ciudad de Santa Cruz, la capital regional, y el segundo en la provincia Velasco, indicó a los medios el director del Servicio Departamental de Salud (Sedes) cruceño, Erwin Viruez.
«Ambos gozan de condición clínica estable» y están con vigilancia epidemiológica, señaló Viruez.
El paciente reportado en la ciudad está siendo atendido en su domicilio y también se hizo controles a las personas que estuvieron en contacto con él, mientras que el otro caso sospechoso «está siendo controlado por el personal de salud» de la misma forma, indicó.
Las muestras de ambos pacientes fueron enviadas al Centro Nacional de Enfermedades Tropicales (Cenetrop) para confirmar o descartar que se trata de contagios de viruela del mono, o si son «otras enfermedades eruptivas», agregó.
A principios de mes fueron descartados otros dos casos sospechosos de la enfermedad registrados también en Santa Cruz
El Gobierno boliviano declaró en mayo alerta epidemiológica y presentó un protocolo para uniformar la forma de atención en las nueve regiones del país ante cualquier caso sospechoso de esta enfermedad que ya fue detectada en naciones vecinas como Argentina, Brasil y Chile.
La viruela del mono, conocida también como viruela símica, es una zoonosis viral -es decir, provocada por un virus transmitido de animales a personas- de la familia de los ortopoxvirus, el mismo del virus Variola causante de la viruela humana, erradicada en 1980.
Los síntomas son similares a los de la erradicada viruela, pero algo más leves, como fiebre, dolor de cabeza, muscular y de espalda, escalofríos y agotamiento, y con frecuencia hay inflamación de los ganglios y una erupción cutánea.