El sábado 30 de julio de 2022, moradores del sector de Monteserrín difundieron en redes sociales un video donde se evidenciaba la agresión que sufrió un can.
El hecho fue propiciado por su dueña en la terraza de su domicilio.
Tras la alerta la Unidad de Bienestar Animal del Municipio acudió al lugar junto con la Agencia Metropolitana de Control para verificar el caso y recabar información.
Daniel Navas, funcionario de la UBA mencionó “Una vez que nos permitieron el ingreso a la propiedad se tomó contacto con la tutora del animal de compañía y se recabó información e indicios respecto del incidente que fue captado en cámaras. Se verificó que el animal pasaba de manera constante en un espacio reducido lo cual pudo generar estrés e hiperactividad en el can que, al generar daño en los enseres, ocasionó que la tutora reaccione de manera violenta”.
Diagnóstico
Al verificar que Bruno, canino de color negro y de aproximadamente dos años de edad, fue agredido físicamente fue trasladado al Centro de Atención Veterinaria, Refugio y Acogida Temporal ‘Cavrat’ ubicado en Calderón para su respectiva evaluación física y etológica.
En el lugar, los médicos veterinarios de la UBA recibieron al paciente a través de consulta general y evidenciaron que llegó ansioso y nervioso.
Además, no se dejaba tocar.
Sin embargo tras lograr obtener su confianza vieron que no presentaba dolor a nivel abdominal ni de cadera.
Tenía una hinchazón al nivel del cuello y un leve dolor en la parte izquierda del tórax.
Los médicos rasuraron la zona para examinar su piel donde se encontró un enrojecimiento de 10 centímetros por consecuencia de golpes.
En la mañana de este domingo 31 de julio, Bruno amaneció con dolor en la parte izquierda del tórax, por lo que se le aplicó una dosis de antinflamatorios y analgésicos.
Kevin Morales, Médico Veterinario de la UBA evaluó al paciente y mencionó “Bruno se encuentra más activo, socializa con otros perros, está alerta y juguetón”.
Leyes
De acuerdo al Artículo 3352 del Código Municipal del Distrito Metropolitano de Quito, este acto sería considerado como una infracción muy grave, sancionada con USD 4250.
Esto, por «provocar intencionalmente en los animales daño o sufrimiento en cualquiera de sus formas».
En este tipo de acontecimientos, en el que resulte afectado un animal, conforme lo tipificado en la normativa vigente, se deberá elaborar el informe integral técnico de la inspección a fin de poder realizar las acciones legales pertinentes ante la justicia ordinaria de ser el caso.
Asimismo, según el Artículo 3347, si se verifica la existencia de un daño o peligro inminente o futuro en contra de uno o varios animales, se procederá a la imposición de la medida cautelar que fuere pertinente para el caso concreto, a fin de proteger al animal o animales cuya vida o integridad pudieran verse afectadas.
Por el momento, la Unidad de Bienestar Animal continuará atendiendo a Bruno, recibirá terapia de rehabilitación comportamental.