La defensa de Nikolas Cruz, quien mató a tiros a 17 personas en una escuela de Florida (EEUU) en 2018, instó este lunes 22 de agosto de 2022 al jurado a no condenarlo a muerte. Afirmó que su cerebro «se rompió» por ser hijo de una madre biógica alcohólica.
Cruz se declaró culpable del tiroteo perpetrado en la escuela secundaria Marjory Stoneman Douglas de Parkland, unos 70 km al norte de Miami. Sin embargo, el jurado tiene que decidir si lo condena a muerte o a la cadena perpetua.
La letrada del acusado, Melisa McNeill, dijo a los miembros del jurado que el joven de 23 años nació de una madre «sin techo y con problemas mentales». Además su progenitora consumió alcohol y drogas durante su embarazo.
Defense attorney Melisa McNeill claimed that the Parkland shooter's sister watched their biological mother smoked crack and rented out the apartment for others, so they can smoke also. pic.twitter.com/heN1dTu3PG
— Law&Crime Network (@LawCrimeNetwork) August 22, 2022
«Debido a que Nikolas fue bombardeado por todas esas cosas, fue envenenado en el útero. Por ello, su cerebro se rompió irremediablemente, sin que él tuviera la culpa», dijo. McNeill añadió que durante gran parte de la vida de su cliente no se abordaron sus problemas de desarrollo y comportamiento. Ni siquiera cuando sus profesores aseguraran que era una amenaza para sí mismo y para los demás.
17 muertos en un tiroteo
El 14 de febrero de 2018, un año después de su expulsión de la secundaria, Cruz acudió a la escuela con un fusil semiautomático con el que mató a 17 personas, incluidos 14 estudiantes.
Su abogada defendió que las circunstancias del nacimiento de su cliente y su crianza deberían mitigar el castigo, y que la cadena perpetua era más apropiada que la ejecución. «La decisión de Nikolas Cruz de tomar un Uber para ir a la escuela secundaria Marjory Stoneman Douglas y matar a todas las personas posibles no es donde comienza la historia de Nikolas Cruz», dijo.
McNeill afirmó que Cruz había nacido con un trastorno de estrés alcohólico fetal y que había sido diagnosticado a los tres años con un trastorno de personalidad antisocial. La madre biológica del acusado lo entregó para adopción. A su vez su madre adoptiva también se tornó alcohólica, y el chico creció en un hogar roto, agregó la abogada.
Los miembros del jurado, que visitaron el lugar de la escuela y a los que los fiscales mostraron en julio los estremecedores vídeos del tiroteo. La eventual decisión de condenarlo a muerte deberá ser aprobada por la unanimidad del jurado.
Con información de | Agence France-Presse/