Un ciudadano australiano, desde este 31 de marzo hasta nuevo aviso, ya no podrá adquirir más de 12 botellas de vino y 48 de cerveza, debido a la nueva resolución de la asociación de vendedores minoristas de bebidas alcohólicas. ¿La razón?
No se trata de una acción para frenar el alcoholismo sino para evitar que se terminen las reservas de alcohol. Las bebidas alcohólicas han tenido una fuerte demanda generada luego de implementarse las medidas nacionales en contra de la expasión del nuevo coronavirus.
El cierre de los comercios «no esenciales», incluidos los bares, restaurantes y discotecas, hizo que muchos ciudadanos vayan a los supermercados y compren bebidas alcoholicas. Ante esto, Julie Ryan, directora general de Retail Drinks Australia (Asociación de Vendedore Minoristas de Bebidas) dijo:
Es evidente que la incertidumbre sobre el suministro han llevado a algunos a comprar de forma diferente. Estas medidas temporales permitirán a todos los clientes tener acceso a sus bebidas favoritas cuando lo decidan.
Las restricciones prevén que un cliente no comprar más de 12 botellas de vino, dos paquetes de 24 cervezas o dos litros de licor, una práctica que ha sido recurrente desde que fue decretado el confinamiento obligatorio.
Las cifras publicadas por el Commonwealth Bank, una de las mayores instituciones financieras del país, muestran que el gasto en alcohol en las tiendas de licores aumentó un 86% la semana pasada.
Fuente | The Objective/AFP