Un grupo terrorista asesinó a 19 personas en una aldea del oeste de Níger mientras estaban congregadas en torno a la mezquita rezando la última oración vespertina, lo que eleva a más de 150 los nigerinos muertos en este tipo de ataques en los últimos dos meses.
El ataque se produjo en el poblado de Tem, en el municipio de Anzourou, cercano a la peligrosa triple frontera con Mali y Burkina Faso; y lo llevaron a cabo hombres armados y montados en motocicletas en la noche de este viernes, según informaron hoy testigos a Efe.
Fueron asesinados 19 aldeanos a quemarropa y varios más, cuyo número se desconoce, resultaron heridos.
«Los atacantes llegaron por la noche, mientras los pobladores realizaban la última oración vespertina (Icha) en los terrenos de la mezquita principal de los viernes de la aldea», dijo Karimou Hamani, maestra jubilada de Tillabéry, contactada por teléfono por Efe.
«Primero cerraron las principales carreteras de acceso a la aldea y rodearon la mezquita, antes de entrar corriendo y disparar a los fieles que estaban rezando«, agregó Hamani.
«En la mezquita,16 personas murieron instantáneamente. Entre los heridos de gravedad que se dirigían al hospital de Tillabéry, tres sucumbieron a sus heridas», dijo la profesora.
ATAQUES TERROTISTAS
Este nuevo atentado terrorista contra pobladores del cantón de Anzourou, Níger, se produce en apenas 48 horas; esto después de que diputados y nacionales de Tillabéry residentes en Niamey condenaran enérgicamente el «abandono» por parte del Gobierno de su región.
En una declaración, exigieron además «el levantamiento de la medida que prohíbe la circulación de motocicletas vigente desde enero de 2021 como parte del estado de emergencia de seguridad»; ya que no ha impedido que los terroristas circulen con ellas y lleven a cabo sus ataques.
También llamaron al Estado a «proteger mejor a la población civil», fortaleciendo el sistema militar con más efectivos y material de guerra adecuado.
Durante el primer trimestre de este año, los habitantes de Anzourou huyeron de sus aldeas por miles para refugiarse en Tillabéry, la capital de la región, y escapar así de los ataques terroristas.
Acordaron con el Gobierno regresar a su tierra a principios de junio con una fuerte escolta militar,;bajo la promesa oficial de que les sería brindada una protección duradera a partir de ese momento.
Níger vive meses especialmente trágicos con más de 150 civiles asesinados desde finales de junio a sangre fría mientras trabajaban en sus campos en varias regiones del sur y oeste del país; las zonas más afectadas por bandas terroristas que buscan obligar a la población a abandonar sus tierras.
En los últimos años, en el país extienden su influencia dos grupos yihadistas, el Estado Islámico en el Gran Sahara (EIGS) y el Grupo de Apoyo al Islam y los Musulmanes (JNIM, por sus siglas en árabe), afiliado a Al Qaeda; además de la secta Boko Haram.
EFE