A pesar del alza en los contagios, varios países de América Latina reanudarán algunas actividades la próxima semana para hacer frente a los efectos económicos de la pandemia del nuevo coronavirus pese a que la tasa de contagios sigue al alza.
El gobierno de Bolivia aprobó el regreso del transporte público y de gran parte de las actividades económicas y laborales a partir del lunes tras 70 días de cuarentena. Sin embargo, las labores escolares y el entretenimiento seguirán suspendidos, las fronteras continuarán cerradas y los vuelos internacionales restringidos.
“Hemos vivido en cuarentena pero no ha dado resultado. Ahora la gente necesita trabajar para comer”, se quejó Mario Suárez, alcalde de Trinidad, capital del departamento Beni. En esa ciudad, de 140.000 habitantes, los servicios funerarios han denunciado la falta de madera para fabricar ataúdes.
Regiones con más contagios seguirán en cuarentena
Beni y Santa Cruz, las regiones más golpeadas por la pandemia, seguirán en cuarentena. El 88% de los 8.387 contagios registrados en el país se concentran en esas dos regiones, donde los servicios médicos están al tope o ya han sido rebasados. Hasta el viernes, además, Bolivia había registrado 293 decesos.
México también se prepara para regresar paulatinamente el lunes a las actividades después de diez semanas de cuarentena, pero en la práctica sólo el estado de Zacatecas, en el centro del país, podrá hacerlo porque el resto sigue en “semáforo rojo”, es decir, que debe mantener el aislamiento social.
Este “semáforo rojo” implica que sólo se permiten las actividades esenciales. No obstante, el lunes podrán operar las empresas de minería, automotrices, aeroespaciales y de construcción que hayan validado sus protocolos de bioseguridad con el gobierno. El retorno a las clases se retrasará como mínimo hasta el 10 de agosto pero sólo si los estados han llegado al “semáforo verde” y lo hacen bajo determinadas medidas como el uso obligatorio de cubrebocas y la alternancia de alumnos según el apellido, por lo que cada niño irá a clase unos días a la semana.
México registra 81.400 casos confirmados y al menos 9.044 muertos.
En contrapartida, el presidente colombiano Iván Duque amplió el aislamiento obligatorio por un mes más a partir del próximo lunes debido al aumento de los contagios, aunque habrá 43 nuevas excepciones, entre ellas los servicios de peluquería, bibliotecas, centros comerciales y museos. Estos últimos sólo podrán funcionar al 30% de su capacidad. Los bares, discotecas, restaurantes y el servicio aéreo nacional e internacional seguirán restringidos.
La alcaldesa de Bogotá, Claudia López, cuestionó la decisión y sostuvo que “si abren los centros comerciales, pues va a haber clientes. Es un engaño a la ciudadanía decirle que hay aislamiento preventivo. No hay aislamiento, el señor presidente acabó con la cuarentena”. Agregó que “no hay cuarentena con 43 excepciones, no hay aislamiento con 43 excepciones, lo que hay es la autorización de reactivación económica para privilegiar el empleo”.
El Departamento Administrativo Nacional de Estadística colombiano informó que la tasa de desempleo pasó de 10,3% en abril del año pasado a 19,8% en el mismo mes de este año, el nivel más alto para este mes en casi dos décadas. Colombia tiene 25.366 contagiados y 822 fallecidos.
En tanto, Chile registró un nuevo récord de muertos en un día con 54 fallecidos, lo que elevó la cifra total a 944, mientras los casos superaron los 90.000. La mayoría se concentra en la capital chilena, que el viernes inicia su tercera semana de encierro obligatorio.
La política inicial del gobierno ante la pandemia fue detectar y aislar a los contagiados, pero en mayo fue tal el aumento de infectados que se perdió en gran parte su control.
Ante las críticas de que no se estaría siguiendo telefónicamente a los contagiados y a sus contactos, el ministro de Salud, Jaime Mañalich, dijo que el porcentaje de llamados que resta hacer “es relativamente menor”.
Los contagios sin control presionan al máximo al sistema de salud capitalino que, a pesar de que diariamente suma nuevas camas para el uso de pacientes en estado crítico, a menudo llega a su límite y debe derivar enfermos a centros médicos del sur y norte del país.
En tanto, el Ministerio de Salud de Ecuador informó que se han reportado hasta el viernes 3.334 fallecidos a causa del COVID-19 y 38.571 contagiados.
En El Salvador, el ministro de Salud Francisco Alabé reportó que el sistema penitenciario registra 142 casos positivos de COVID-19, la mayoría asintomáticos, y no hay casos graves, mientras que hay 945 sospechosos de ser portadores.
El director de Centros Penales, Osiris Luna, explicó que los casos se han registrado en tres centros penitenciarios y en el “resguardo” del Hospital Psiquiátrico, ubicado en la periferia de la capital.
Según cifras oficiales, hasta el 27 de mayo, 39.871 personas guardan prisión en las 26 cárceles del país, que según el criminólogo Ricardo Sosa, tienen un hacinamiento del 135%.
Alabé también explicó que el sistema de salud no ha colapsado, pero afirmó que está llegando al límite.
El país registra 2.278 casos confirmados y 42 fallecidos.
En América Latina se han registrado a la fecha unos 853.900 contagios y más de 45.900 muertos. Brasil tiene la mayor cantidad de infecciones y decesos y es el segundo país más afectado del mundo sólo después de Estados Unidos.
A nivel mundial se han infectado más de 5,8 millones de personas y muerto más de 361.200, según el Centro de Ciencias e Ingeniería de Sistemas de la Universidad Johns Hopkins, que basa sus datos en los informes de los gobiernos y las autoridades de salud de cada país. AP