La Organización Mundial de la Salud (OMS) alertó hoy sobre la falta de concentradores de oxígeno, necesarios para tratar a los casos más graves de COVID-19.
Manifestó que el 80 por ciento del mercado está concentrado en unas pocas compañías, por lo que anunció medidas para facilitar el suministro.
«Muchos países están experimentando dificultades para obtener concentradores», que extraen y purifican del aire el oxígeno necesario para tratar pacientes en estado crítico o grave que no pueden obtener el suficiente al respirar, explicó el director general de la OMS Tedros Adhanom Ghebreyesus en rueda de prensa.
Tedros subrayó que al actual ritmo de un millón de nuevos casos globales cada semana se necesitan unos 620.000 metros cúbicos de oxígeno diarios
Lo que equivale a 88.000 bombonas para los pacientes.
Anunció que la OMS ha adquirido recientemente 14.000 concentradores, que enviará a 120 países.
Sin embargo, necesitará unos 170.000 más en los próximos seis meses, valorados en unos 100 millones de dólares.
Tedros también señaló hoy que el número de casos globales de COVID-19 superó la barrera de los nueve millones,
Asimismo dijo que se alcanzarán los 10 millones la próxima semana, al actual ritmo de alrededor de 150.000 nuevos contagios diarios.
La pandemia sigue en una fase «preocupante e intensa»
La pandemia de COVID-19 en Latinoamérica, región que está a punto de superar la barrera de los 100.000 muertos, se encuentra en «una fase intensa, con una tendencia preocupante a un continuado aumento de casos», subrayó hoy el jefe de emergencias de la OMS
El director ejecutivo de Emergencias Sanitarias del organismo, Mike Ryan, indicó en rueda de prensa que en América se han medido aumentos en el número de casos de entre el 25 y el 50 por ciento en la última semana y «muchos países siguen teniendo una transmisión comunitaria sostenida».
La pandemia llegó más tarde a la región que a otras zonas gravemente afectadas como Europa o Estados Unidos.
Sus tasas de mortalidad son algo más bajas, pero Brasil es el segundo país del mundo en número de muertos, con más de 51.000.
México el séptimo, superando los 22.000 decesos.