“Yo no quiero suerte” es el nuevo videoclip que estrena Alejandro Sanz en el que hace una declaración de intenciones.
Apuesta por una vida intensa y sincera, dónde no tiene cabida la suerte o el azar y todo recae en lo que tienes cerca, en lo que uno mismo se ha construido.
La obra audiovisual, protagonizada por el propio Alejandro Sanz, está cargada de detalles, donde él se convierte en el guía de un largo viaje lleno de colores y emociones.
Ponen al descubierto cinco escenarios en un solo abrir y cerrar de ojos.
El videoclip está dirigido por Gus Carballo y Adrián Egea Grespán y está grabado en plano secuencia con alteraciones de zoom, con lo que Sanz busca canalizar la atención en la historia.
“Yo No Quiero Suerte” está incluido en su último álbum, SANZ, el cual entró directo al #1 en la lista TOP 100 álbumes y en la lista Top 100 vinilo.
Actualmente, el artista madrileño se encuentra de gira por Latinoamérica y el próximo 4 de junio arrancará su nueva gira SANZ EN VIVO, en Madrid.
Alejandro Sanz presenta su nuevo álbum «SANZ»
Alejandro Sanz lleva toda la vida escribiendo canciones, y esta vez nos deleita con el lanzamiento de su más reciente álbum titulado «Sanz».
La canción es un producto artesano, el resultado de la transformación y manipulación de materiales esenciales, comunes a cualquier partitura. Letra y melodía son las partículas elementales de cualquier canción. Interactúan entre sí irradiando a quien escucha en un proceso intangible que entronca con lo mágico.
El que aspire a dominar el oficio de componerlas debe conocer la naturaleza de dichas partículas. Aprender a combinarlas en rigurosa disciplina de ensayo-error. Asumir la tarea de un aprendizaje sin fin, el desafío que aguarda en el próximo verso y en la siguiente rueda de acordes.
Alejandro Sanz ha estudiado a fondo su anatomía, profundizado en su genealogía, experimentado con las múltiples permutaciones del sumatorio melodía+letra.
Por eso, en su nuevo álbum construye una obra que sorprende por su consistencia pero también por su dinamismo y variedad de registros.
Diez canciones que palpitan con sutil latido flamenco, en las que conviven lo acústico y lo electrónico, sencillos compases ancestrales y ambiciosos arreglos de orquesta. Con un aparejo de mínimos –las palabras adecuadas, la tonada que atrapa–, conquista un territorio de máximos artísticos.
Cada pieza de “Sanz” –producido por Alfonso Pérez con Alejandro Sanz y Javier Limón– tiene su propia entidad, pero conviene atender al conjunto para apreciar el trabajo como merece.
En tiempos de atomización y dispersión, de singles huérfanos de continuidad y focus-track sin anclaje conceptual, el músico madrileño apuesta por un disco único.