Durante el 2022 en Ecuador se han registrado varios hechos que han marcado una desestabilidad política. El gobierno de Guillermo Lasso tuvo que enfrentar un paro de 18 días y un intento de destitución por parte de la Asamblea.
«Un año de pocos avances» y donde se ha profundizado la pugna entre el Ejecutivo y Legislativo, así describe al 2022 el analista Mauricio Alarcón.
El paro nacional es el suceso que marcó este año. Según el analista Santiago Basabe la causas de estas movilizaciones aún no han sido resueltas y por ello cree que será cuestión de meses para que este tipo de hechos vuelvan a suceder, incluso prevé que podría ocurrir después de las elecciones seccionales de 2023.
PUGNAS EN INSTITUCIONES
No obstante, este no es el único hecho que preocupa a los expertos, pues los conflictos entre el poder Legislativo y Ejecutivo han causado desestabilidad en otras instituciones y están lejos de terminar.
Por ejemplo, el Consejo de Participación Ciudadana y Control Social (Cpccs) ha atravesado destituciones y restituciones por órdenes judiciales, y una pelea constante con la Asamblea.
De igual forma en el Consejo de la Judicatura los problemas y pugnas no han cesado. Su presidente, Fausto Murillo, se encuentra en el cargo gracias a una acción de protección. Además, este organismo suspendió al presidente de la Corte Nacional, Iván Saquicela, y sus consejeros aparecen en audios supuestamente interfiriendo en la justicia, sin embargo, se salvaron de juicios políticos.
Este año también tuvimos dos Superintendentes de Bancos, una Asamblea que destituyó a su presidenta, Guadalupe Llori, y afianzó una mayoría de oposición.
Ante ello, consideran que todas las tensiones en estos organismos están fuertemente relaciones con el uso y abuso del derecho y las acciones de garantías.
Para los analistas, Mauricio Alarcón y Santiago Basabe, el próximo año estará marcado por manifestaciones. Las mismas que se podrían evitar si el presidente de la República responde a las demandas ciudadanas.
LO POSITIVO
No obstante, de acuerdo con los especialistas, este año también hubieron aspectos positivos en Ecuador, entre ellos el trabajo de la Superintendencia de Control de Poder de Mercado, Cancillería y la Corte Constitucional, aunque califican sus últimas actuaciones como indiferentes con la realidad del país.
Revisa también:
- La oposición legislativa rechaza el veto total de la reforma tributaria
- Jorge Glas tiene cinco días para certificar su operación a la Corte de Quito
- Expectativa en los ecuatorianos por posible eliminación de visa Schengen