En Cotopaxi, decenas de comuneros se encuentran preocupados ante la muerte de más de mil ovejas en los últimos días.
La Gobernación de Cotopaxi confirmó que se trata de 1.200 mamíferos pertenecientes a 21 comunidades de Cachi Alto en Pujilí.
Hasta el momento no se ha identificado al responsable de estas muertes, sin embargo, el Ministerio de Ambiente sospecha que se trataría de perros ferales.
Los moradores han mostrado su preocupación pues la muerte de las ovejas representa pérdidas económicas.
Sólo una oveja puede llegar a costa hasta $200.
En el mes de febrero, representantes del Ministerio visitaron la comunidad Yanahurco Grande de Saquisilí para investigar un caso similar.